Director: Brad Furman
Al final no vi la película que dije iba a ver, pero no importa, mientras estemos lo más lejos posible de "Black Mirror" entonces no me voy a quejar. En lugar de lo originalmente planeado, me puse a ver "The Infiltrator", película dirigida por Brad Furman y protagonizada por Bryan Cranston, ya saben, el papá de Malcolm en "Malcolm in the middle". Debo decir que echaba de menos sacar capturas, supongo que éso es lo único bueno de haber visto esta película, que tampoco es mala. Pero bueno, ya tendré tiempo de explayarme... o no.
Supongo que "The Infiltrator" surgió gracias al éxito que ha tenido "Narcos" y, más específicamente, la figura de Pablo Escobar, que acá cuenta con una participación limitada, si bien su influencia está presente durante casi todo el metraje. Ambientada en la mitad de los ochenta, "The Infiltrator" trata sobre un agente de aduanas (increíble la cantidad de agencias federales que tiene Estados Unidos, ¿eh?) que trabaja encubierto para atrapar a los malos que meten droga al país, y que comenzará probablemente la misión más importante de su vida. El agente es Bryan Cranston y la trama está basada en una historia real. En su favor diré que "The Infiltrator" es una película bien hecha y que destaca por su corrección formal, lo que, sin embargo, significa, como en la mayoría de las veces, que la labor de Brad Furman tras las cámaras es completamente impersonal, sin punto de vista que aportar, sin propuesta que potencie una historia que, sin duda alguna, pudo haber dado muchísimo de sí, sobre todo por culpa de un guión que sugiere bastante más de lo que finalmente acaba tratando, sobre lo que quizás el montaje también tenga cierta responsabilidad, dado que no anduvo muy fino a la hora de armar el corte final, destacando inexplicables escenas que, además de introducir personajes dramáticamente inútiles, también pretende colar conflictos que luego no son tratados y quedan aislados, fuera de lugar (como cuando el compañero de Cranston se siente mal y lo llama, para que un par de escenas más tarde aparezca como si nada hubiera pasado), dando como resultado un conjunto algo desconcertante. De esta forma, pudo haber sido un complejo entramado sobre las instituciones y agencias estadounidenses, sobre sus oscuros e intrincados mecanismos (por no mencionar su ambigua moral), sobre sus vulnerabilidades. Pudo haber sido una cruenta y descarnada mirada al mundo del narcotráfico, a la naturaleza humana y todas esas cosas. En vez de eso, "The Infiltrator" es la enésima proeza de un héroe que lo arriesga todo con tal de proteger a los ciudadanos. Nada nuevo bajo el sol, esta película ya la he visto antes. Sí me han gustado algunos personajes, básicamente porque de no ser por ellos entonces "The Infiltrator" habría sido mucho, mucho más sosa y plana de lo que es, y es que, dentro de todo, lo más convincente es la construcción de la amistad entre el protagonista y sus nuevos "amigos" traficantes, aunque tampoco es que hayan muchas dudas sobre con quién se queda el buen Cranston: si con su país o con los malos que lo destruyen por dentro. Todo se sabe de antemano, la trama discurre sin mayores sorpresas y, bueno, cuando termina no es que sintamos mucho: a lo mejor hubo un par de escenas genuinamente buenas, pero, a nivel general, la atmósfera y el retrato de la amoralidad y la violencia brillan por su ausencia, por lo que sólo vemos una sucesión de imágenes que se van tan rápido como llegan. Yo mejor les recomiendo "The Counselor", que tiene todo lo que ésta carece y más, mucho más...
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