Director: Tobe Hooper
Este es el remake de la película de 1953, la dirigida por William Cameron Menzies. Pude encontrar, y sin que me esforzara en lo absoluto, tres referencias/homenajes hacia la original: 1.- El colegio al que asiste el insoportable protagonista se llama Menzies High School. 2.- En una escena, cuando los personajes están en un sótano, una linterna alumbra un modelo/juguete del cerebro villano. 3.- El niño que protagonizaba aquella lejana película acá aparece en un papel menor pero reconocible: es uno de los policías que buscan al padre del protagonista, cuando este no llega aún a la casa (presumiblemente perdido por donde se avistó el ovni).
"Invaders from Mars" (1986) es malísima. Horripilante. Es un verdadero insulto. Es una ridiculez, una cosa absurda sin pies ni cabeza. Para empezar, todas las actuaciones son pésimas y bochornosas; el reparto completo está mal elegido y peor interpretado. El protagonista no sirve ni para correr de forma creíble. Está mal escrita. Los personajes son planos, son vacíos y son estúpidos; sus relaciones están burdamente construidas y es imposible tomarse en serio sus propósitos. Algunos ni siquiera son útiles, sobran por completo, como el personaje de la enfermera que "ayuda" al protagonista a salvar al mundo de los marcianos (o a rescatar a sus padres, que no se sabe qué demonios buscan en todo caso); en la película original, ese rol verdaderamente tenía solidez y sustento, además tenía dignidad, en cambio acá la pobre enfermera se la pasa gritando y poniendo cara de histérica, si hasta el niño apestoso se hace el héroe con ella y le dice "tranquila nena, yo me encargo". Para peor, se inventan una maestra de escuela (que conduce una furgoneta propia de pederastas al acecho, furgoneta llena de animales disecados más encima) que acaba siendo la villana (¿?). Y el plan de los marcianos, llamémosle terrorismo interplanetario, no tiene lógica (es contradictorio e improvisado). Y los bichos esos son inservibles, son unas cosas deformes que no sé cómo fueron aprobados; van en cuatro patas, parecen no tener ojos, y tienen unos brazos que no miden más de cinco centímetros, así que no sé cómo demonios pueden hacer cosas prácticas. Puede que en la versión del cincuenta los marcianos fueran personas disfrazadas de verde, pero demonios, al menos podían tomar un objeto (un lápiz, digamos) sin tener que hacer burdas contorsiones. Oh, ya que estamos en ello, por alguna razón se puede entrar a la nave por uno de los tantos túneles que los bichos van dejando por el pueblo, lo cual no es un muy buen sistema de defensa que digamos, no como en el cincuenta, en donde la entrada era una sola y no tan fácil de destruir. Por lo demás, me pregunto si para los diseñadores una nave espacial debe lucir como una maldita discoteca. ¡Y todavía no puedo creer que los marcianos se saboteen a sí mismos! Resulta que en una escena los dos policías controlados casi atrapan al chico, y de repente se hace un hoyo en mitad de la habitación (obra y gracia de la mente maestra del gran cerebro marciano), y listo, protagonista salvado ¡por los mismos antagonistas! Si los marcianos prefieren matarse entre sí antes que matar al niño ese. En fin...
Lo peor de lo peor, lo que más me molestó, es el cambio de conducta de los humanos controlados por los marcianos. En la original, la única pero esencial diferencia era su inusitada agresividad y violencia. Acá, en cambio, simplemente son raritos: quedan como atontados, como zombies, se mueven como robots oxidados... y uno se pone a masticar bolitas de sacarina como si fueran chicles, otra saca carne molida y cruda del refrigerador, las hace bolita, les pone sal y se las come así como así, ¡incluso otra se come una rana viva! No se puede ser más obvio, menos sutil, más efectista y menos inteligente. Demuestra la total falta de contenido de esta bazofia. En la original (hasta me permito traer a colación a los ladrones de cuerpos de Siegel) el asunto de la usurpación tenía dos significados importantes: primero, lo del enemigo "invisible", el miedo al otro, al semejante, al enemigo que podría estar en cualquier lado, en cualquier persona, incluso dentro de tu propia familia, que poco a poco va destruyendo, desde dentro, a un país entero, lo cual podría leerse como parte de los miedos creados con la Guerra Fría; segundo, era decidor que el rasgo que los distinguiera de los verdaderos humanos fuera la agresividad y la frialdad, la impasibilidad, dando cuenta del valor de la confianza y de la idea que podamos tener de "humanidad" (¿podría ser la compasión la base de dicho concepto?, ¿se es humano si no se tiene compasión por el resto, sean personas o animales de otra especie?). Acá, ya digo, parece que a los marcianos les falla el control remoto porque ponerse a comer una rana viva...
Lo peor de lo peor, lo que más me molestó, es el cambio de conducta de los humanos controlados por los marcianos. En la original, la única pero esencial diferencia era su inusitada agresividad y violencia. Acá, en cambio, simplemente son raritos: quedan como atontados, como zombies, se mueven como robots oxidados... y uno se pone a masticar bolitas de sacarina como si fueran chicles, otra saca carne molida y cruda del refrigerador, las hace bolita, les pone sal y se las come así como así, ¡incluso otra se come una rana viva! No se puede ser más obvio, menos sutil, más efectista y menos inteligente. Demuestra la total falta de contenido de esta bazofia. En la original (hasta me permito traer a colación a los ladrones de cuerpos de Siegel) el asunto de la usurpación tenía dos significados importantes: primero, lo del enemigo "invisible", el miedo al otro, al semejante, al enemigo que podría estar en cualquier lado, en cualquier persona, incluso dentro de tu propia familia, que poco a poco va destruyendo, desde dentro, a un país entero, lo cual podría leerse como parte de los miedos creados con la Guerra Fría; segundo, era decidor que el rasgo que los distinguiera de los verdaderos humanos fuera la agresividad y la frialdad, la impasibilidad, dando cuenta del valor de la confianza y de la idea que podamos tener de "humanidad" (¿podría ser la compasión la base de dicho concepto?, ¿se es humano si no se tiene compasión por el resto, sean personas o animales de otra especie?). Acá, ya digo, parece que a los marcianos les falla el control remoto porque ponerse a comer una rana viva...
Volviendo al reparto, me sorprendo al ver que no tenían tan malas películas en su haber. El protagonista, por ejemplo, había actuado en "Paris, Texas" y hasta fue nominado por su interpretación. Karen Black, que es la enfermera que "ayuda" al chico, había actuado antes para Hitchcock, Coppola, Robert Altman, Bob Rafelson, "Easy Rider"... A lo mejor nunca fueron buenos actores, pero sí aparecieron en buenas películas. En caso de que sí hayan sido buenos actores, bueno, eso demuestra el terrible trabajo de dirección de actores de Tobe Hooper. Me pregunto si dirigió esta...
Lo importante de todo esto es que estamos ante una basura inenarrable. Sin apelaciones. Bórrenla, bótenla, elimínenla.
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