Directores: David & Nathan Zellner
"Damsel" es un correcto y bien facturado western, pero no me ha parecido tan interesante ni sugerente como se decía. Su gran gracia sería la forma en que desenvuelve y/o desentraña su argumento a pura base de, otra vez, equívocos en donde nada de lo que se dice o hace es lo que aparenta, sorprendiendo (en teoría) al espectador con su gran giro central y luego los pequeños cambios de timón que tampoco desandan lo ya construido hasta entonces, ni en tono ni en narrativa. No sé si estamos ante una película de personajes, cuyos destinos se entrecruzan en el wild wild west, o si solamente se nos cuenta una más o menos ingeniosa historia de venganzas e irónica violencia. El asunto es que Robert Pattinson es un sujeto, otro chute, que contrata a un predicador alcohólico y poco higiénico para que oficie la boda con su prometida, aunque la prometida esté en otro lugar y para llegar a ella haya que recorrer montañas y valles. En realidad el gran protagonista es el predicador, al que en la introducción de la película vemos confesar que desea empezar de cero en el oeste, si bien es notorio que sus deseos no se cumplieron cuando Pattinson arriba a su vida; y el argumento consiste en este predicador, reducido a espectador, sin mucha injerencia en todo este asunto de la novia y del enamorado, lo cual es una idea interesante, eso de colocar el protagonismo en segundo plano. Por supuesto, el viaje no será fácil, la experiencia será dura, y lo que suceda después tampoco será muy auspicioso para los que queden con vida. Lo mejor, sin duda, es, digamos, el episodio central, el de la cabaña en mitad de la montaña. El resto está bien, está contado con ritmo y con pulso, pero, insisto, no sé si debemos preocuparnos más de su "comedia absurda" o de su anti-historia de amor, o acaso de lo terrible que debió haber sido vivir en un tiempo y un lugar tan desolador y solitario y tan con la muerte respirándote en la nuca a cada momento que hace que amor y muerte sean casi la misma cosa, pero no, no estamos ante un western existencial...
En fin, como curiosidad la recomendaría, pero a mí no me ha parecido la gran cosa ni dejado gran huella más allá de su puñado de buenas, incluso potentes escenas.
En fin, como curiosidad la recomendaría, pero a mí no me ha parecido la gran cosa ni dejado gran huella más allá de su puñado de buenas, incluso potentes escenas.
Al menos se ve que el western se rehúsa a desaparecer del cine por el momento...
ResponderBorrarCuriosamente, tanto éste como el de Audiard y el de los Coen son los únicos tres westerns del 2018, ¡y ninguno me gustó mucho! (aunque el de Audiard cerca estuvo). Igual sigue siendo un número pequeño, ni siquiera sé si se anuncian proyectos del género para el 2019... Mientras el western siga vivo en nuestros corazones, seguirá latiendo la esperanza.
Borrar(Necesito, sí, purificarme un poco de tanto 2018 con unos cuantos westerns).
Sí, no es producido en la cantidad ni calidad que uno desearía, pero al menos los proyectos más o menos conocidos siguen apareciendo en años recientes, como esa 'Slow West' de la que apenas me enteré. Bendito internet que permite que la llama de los viejos y buenos westerns siga viva en nuestros corazones. ¡Ey! Podrías aprovechar las fechas para ver '3 Godfathers'. Una sugerencia, jajaja.
Borrar¿La de Ford? Je, je sí la comenté, y según recuerdo no me gustó mucho :S
BorrarEl 2017 hubo más westerns, de hecho como no me gustaron estos tres westerns del 2018 tengo planeado (porque las tengo en la mira desde hace harto rato) contraatacar con "Hostiles", "The Ballad of Lefty Brown" y "Outlaws and Angels", las tres, qué felicidad, rodadas en 35mm. Quizás no sean buenas pero es también bueno que mantengan el film alive.
¿Y qué tal "In a Valley of Violence", de Ti West, rodada en 35mm también? Esa también está comentada por acá. Supongo que después de eso volveremos a los cincuenta, que queda poco para comenzar de lleno con los de los sesenta.
¡Saludos!