The Secret of Convict Lake - 1951

Director: Michael Gordon

"The Secret of Convict Lake", único western dirigido por Michael Gordon, protagonizado por Glenn Ford y Gene Tierney, se basa o inspira en eventos reales ocurridos en la zona de ese lago, que en su momento se llamaba Monte Diablo aunque luego de ciertas fechorías cometidas por unos reos fugados pasó a llamarse Convict Lake. La premisa es la siguiente: de una cárcel escapan 29 presos, aunque luego de un tiempo sólo seis de ellos quedan libres, y gracias a una tormenta de nieve logran escapar de la partida de caza del sheriff. Los seis reos (cinco, pues uno murió en el camino) llegan a un pueblo momentáneamente sólo habitado por mujeres cuyos maridos se hallan en otros lados buscando plata, el mineral. La situación parece pan comido, piensan los reos, pero las mujeres se defenderán mejor de lo que pensaban, al menos al inicio...
"The Secret of Convict Lake" es un western efectivo, correcto y bastante bien logrado, pero pudo haber sido un western excelente e incluso magistral, por desgracia su prometedor arranque y primer desarrollo pierden potencia al tomar la trama giros más bien predecibles, convencionales o muy simples para lo que se sugería en un inicio. En un inicio esta película parecía apostar esencialmente al suspenso, a la tensión e incluso al terror, creando una atmósfera de extrañeza e inquietud, de sombras y contrastes, en un espacio pequeño, por un período indefinido, las mujeres del pequeño pueblo debiendo controlar a cinco sujetos que, claramente, no saben comportarse y que, para peor, buscan en el pueblo algo más que comida, caballos y "diversión": un cuantioso botín, del que nadie sabe excepto uno de los reos, el cual no quiere soltar la pepa. Este inicio tenso y sostenido, ejecutado con pulso por el director, se pierde poco a poco cuando el guión parece despreocuparse de sus bases dramáticas (los reos de repente se pasean como si tal cosa por entre las cabañas, con armas de fuego y sonrisas grotescas, y las mujeres vuelven a sus quehaceres como si nada), desinflándose la tensión y el suspenso, además de recurrir a enredos sentimentales para hacer avanzar la trama, lo cual resulta muy poco convincente y serio (ahora resulta que la mitad de las muchachas están enamoradas de los reos). Así las cosas, la película es un intercambio de galanterías, preguntas malintencionadas y una que otra bofetada antes del tiroteo final, pues era de esperar que los maridos llegaran justo para salvar la función. Al final hay una suerte de reflexión sobre eso de ser juez y verdugo, de la justicia y de la verdad, de esas cosas.
La película no está mal, desde luego que no, sigue siendo un visionado fluido, con interpretaciones solventes y un director que de todas formas logra rodar escenas con pulso y tino, pero es una lástima que su prometedora y notable primera mitad diera paso a un desarrollo y desenlace predecibles y forzados. Teniendo tantos elementos para manejar el suspenso tan bien instalado al inicio y recurrir a trucos baratos. Como sea, "The Secret of Convict Lake" no deja de ser una propuesta interesante: la nieve, el encierro, la "desigualdad" de las partes enfrentadas...