Bound - 1996

Directoras: Lily & Lana Wachowski

   Pues bien, dado que para la universidad tengo que ver "The Matrix" y analizarla bajo no sé qué marcos teóricos, visionado que claramente voy a comentar por acá -bajo un marco de simple gusto por el cine, nada más-, pensé que sería bueno ver otra vez la opera prima de los Wachowski y dejarles mi opinión. Además, ya ha pasado bastante tiempo desde que vi ambas películas y siempre es interesante comparar miradas separadas en el tiempo. "Bound" me dejó un muy buen sabor de boca, sensación que sigue presente ahora aunque no sin un par de cositas que debo mencionar. De todas formas, el resultado sigue siendo positivo con este estilizado thriller.

  Corky es una tipa que tiene que hacer trabajos de fontanería y reparación en el departamento de alguien más o menos importante. En el ascensor del edificio cruza miradas con Violet, quien vive, mira tú las coincidencias, en el departamento que está al lado del que Corky debe trabajar. Dichas miradas no serán el límite y cuando las cosas se pongan ardientes, también se pondrán peligrosas y un tanto sangrientas.

  Supongo que todo lo que diga de ahora en adelante estará siendo comparado con la percepción que tuve con el primer visionado de hace un par de años y pocos meses. Es inevitable que sea así. En fin, recuerdo que "Bound" me dejó una fuerte impresión de que los Wachowski sabían exactamente lo que querían hacer con su debut en el cine, tanto estética como narrativamente: dirigiendo con seguridad y mano firme. Dicha impresión no ha cambiado en lo absoluto, no como la que me dejó el resultado final... pero ya llegaremos a ello. Primero que todo, se nota que los Wachowski querían contar una historia sobre sexualidades envuelta en un entramado criminal, que es como una especie de "cosa de mujeres versus cosa de hombres". Ninguna categoría es excluyente y por eso puse dicha frase entre comillas: por si hay alguien alarmista y de ofensa fácil. Pero quizás podríamos reemplazar ese "versus" por un "dominado", esto es mujeres que tienen que obedecer y ser las chicas buenas o qué sé yo: ser el florero de los hombres fuertes. No quiero sobre-interpretar y, para serles honestos, estas líneas son teorías que escribo inmediatamente luego de pensarlas, pero "Bound" podría perfectamente ser una rebelación y una liberación, por qué no una consolidación y consumación de ese deseo propio -al menos un intento, inicialmente-. Corky y Violet se atraen y piensan largarse, no sin antes jugar con las cosas que a los otros machos de la mafia les importa tanto. Destaco una línea de Corky que señala, más o menos, "odio a las mujeres que se disculpan por querer tener sexo". En cierta forma, "Bound" es una historia en la que ya no hay que disculparse ni someterse sino que tomar lo que deseas, así de simple. Bien por eso. Los Wachowski no transan en nada ni ante nadie ni tampoco se traicionan a sí mismos: hicieron la película que querían y eso debe ser respetado en cualquier lado... aunque aclaro inmediatamente: no es para admirarlos y ponerlos en un pedestal.

  Continuando con lo de hacer la película con firmeza y seguridad, estéticamente no hay mucho que decir, pues los precisos, suaves y a veces imposibles movimientos de cámara -e "imposibles" transiciones entre escena y otra- también revelan el nivel de estelización que los Wachowski querían, en coherencia con el tipo de relato thriller-criminal que es "Bound"; bajo esta mirada, lo estético no es una falla. Quizás haya un par de excesos -seguir la línea telefónica es uno de ellos- que no queden bien y más parezcan un capricho graciosillo, pero en general el despliegue de la cámara se condice con esa atmósfera un tanto viciada y hasta depravada que los Wachowski quieren generar, y digo "depravada" porque la manera de filmar de los hermanos refleja que los tipos disfrutaban plenamente de lo que hacían y que, a todas luces, también pretenden que uno disfrute sin complejos todo lo que está viendo, con violencia y sangre y sexo explícito incluido. Y claro, "depravada" es usada sin juicios de valor, por si acaso. Con todo, debo decir que, volviendo a comparar impresiones, ésta vez la atmósfera de "Bound" me pareció menos oscura de lo que recordaba, pero igualmente se puede disfrutar, especialmente por el toque depravado: ¿desde cuando uno no puede gozar con un loco presumiendo ante un cadáver?

  En lo narrativo es cuando se comienzan a notar los reproches, que no vienen por la parte de que los Wachowski se debilitaron o dieron su brazo a torcer, pues claramente van a terminar con la misma energía con la que comenzaron, sino en que ya por el tramo final comienzan a estirar el chicle, y la tensión lograda naturalmente por los hechos relatados comienza a volverse forzada y artificial. Es una pena porque durante gran parte de la película los Wachowski se permiten dar un par de giros convincentes y sorprender a ratos, algo que engancha por sí solo, pero luego la cosa se vuelve más obvia en sus intenciones de mantenernos nerviosos, lo que finalmente es contraproducente. Y que quede claro, estiran el chicle con seguridad... pero estiran el chicle, y eso comienza a desgastar un poco.  No es que el relato comience a perder interés ni nada por el estilo, pues las situaciones que seguiremos viendo no pierden su toque; el asunto es que la tensión no es la misma y la impresión causada va perdiendo autenticidad, por lo que la emoción pierde poder y el final se va deseando más no porque la cosa sea tan infartante que uno quiere sentirse tranquilo pronto sino porque uno ya se da cuenta que el relato no da para más y debe terminar pronto si es que quiere hacerlo con dignidad. El otro reproche es mucho más pequeño pero igual considero relevante mencionarlo: relacionado a la atmósfera, hubo un par de momentos de humor negro, digo descaradamente humor negro -porque lo negro subyace durante todo el relato- que tampoco quedaron nada bien, casi antinatural.

  La gran conclusión de todo es que los Wachowski hicieron, tal como señalé anteriormente, la película que querían hacer, nada ni remotamente distinto de aquello. Respeto por eso, pero tampoco se confundan, pues "Bound" no es una maravilla ni una obra maestra ni tampoco una gran película; es, efectivamente, intensa, entretenida e incluso apasionante en ocasiones, pero el desgaste narrativo final se siente y uno no puede decir que estuvo ante una experiencia memorable de principio a fin. Sí, claro que se puede disfrutar de "Bound" sin mayor complejo, y no voy a cuestionar que sea una estupenda opera prima que muere en la suya, pero le falta para ser una película realmente buena y de esas que cuesta olvidar. Se le nota la falta de oficio y madurez a los hermanos, diría yo; pero, honestamente, no sabría describir muy bien qué le falta a "Bound", digo, a parte de una mejora en lo narrativo. En fin...

  Mención aparte para las actrices de Corky y Violet, que tienen una química espectacular. Además aparece Christopher Meloni, quien ahora hace del típico chico lindo imbécil hijito de papá pero que ya lo hemos visto por acá como un débil y patético hombre que sucumbe, dos veces nada menos, ante los encantos de Eva Green en "White bird in a blizzard" y "Sin City 2: A dame to kill for"... quién lo viera y quién lo ve a ese Meloni. Y bueno, Caesar está genial.

  Igualmente recomiendo "Bound", pues tiene contundencia e identidad, seguridad de sobra; y en definitiva: tiene lo suyo.

Gocen hasta donde puedan.