Director: H.P. Mendoza
La magia navideña, ho ho ho. Justo después de haber visto esta película sobre espíritus, mi vecino comienza, justo en la habitación al lado de la mía -pero en su casa, obviamente-, a taladrar y hacer cosas. No es que me haya asustado ni nada por el estilo, pero curioso que se dé esa coincidencia... ruidos saliendo de las paredes... En fin, por alguna razón que se me escapa de la mente, pensaba que esta película era argentina, o al menos que su director era argentino. Pero no, Mendoza es un californiano de ascendencia filipina, lo que viene explicando su apellido. Y me llama la atención que los filipinos tengan esos apellidos que harto se escuchan por acá en latinoamerica; por ejemplo, Lav Díaz -a quien espero más pronto que tarde tener por acá-, Cirio Santiago, Eddie Romero, Gerardo de León... Igual después me pongo a investigar y resulta que al igual que nosotros, en su tiempo Filipinas fue gobernada por españoles, así que ahí tengo mi respuesta: (cierto) legado cultural. Y luego fueron los estadounidenses, y por un rato los japoneses ocuparon el territorio. Una Historia movida la de Filipinas, ¿por qué no me pasaron nada de esto en el colegio? En cualquier caso, mejor me pongo a hablar de "I am a ghost", una película de fantasmas de bajísimo presupuesto que logra diferenciarse de todas sus "semejantes" porque va más allá de los límites que delimitan el género en el que se ubica. Una película marginal, podríamos decir, pero ejecutada con la sobriedad y precisión de alguien que lleva mucho tiempo en el oficio -y si buscamos bien, H.P. Mendoza ha dejado su estampa en varios trabajos, soportes y formatos-. Sí, me ha gustado mucho "I am a ghost".