Director: Mike Cahill
No es que "I Origins" sea una película que haya estado esperando demasiado, de hecho ni siquiera había visto lo anterior de su director, un documental y la película de este post, como para sentirme atraído ante su nueva propuesta. Pero pensé que sería un poco necesario ver el título que lo lanzó a la fama indie. Tristemente, ahora ya no me siento con tantas ganas de ver "I Origins", principalmente porque si es lo mismo que "Another Earth" pero con algo más de presupuesto y actores de renombre, entonces mejor utilizar ese tiempo en otras cosas más productivas. Y puede que "Another Earth" haya causado cierta sensación cuando se estrenó, pero su propuesta no deja de ser una historia simplona y mil veces vista disfrazada de ciencia ficción indie con toques de existencialismo demasiado fallidos. Es gracioso, porque por un lado pienso "como que le pusieron mucho esfuerzo a esta intrascendente cinta", pero por otro me da la impresión de que hicieron lo primero que se les vino a la cabeza. Al final no hay mucho que destacar... a decir verdad, no se me ocurre nada que destacar. Me siento decepcionado.
Brit Marling -actriz que ha adquirido cierta fama a raíz de esta película, que promoción no le faltó- es una tipa que, el mismo día en que se descubre un nuevo planeta -que con el tiempo se muestra idéntico a la tierra y cada vez más cercano-, se embriaga y tiene un accidente de tránsito. Cuatro años después, cuando la sociedad se siente nerviosa ante la presencia del planeta "Tierra 2", la chica esta sale a la calle e intenta retomar su vida.
Si no me lo dice wikipedia entonces no me doy cuenta en nada. Al parecer, Mike Cahill y Brit Marling -crearon la historia juntos- querían hacer una película que tratara sobre el encontrarse con uno mismo, o qué pasaría si uno se encuentra con uno mismo. Y como digo, no es esa la impresión final que me queda. Lo que pensé, más bien, fue que... no... no pude sacar nada en limpio, si les soy sincero. Entre tanta pretensión uno se pierde y no sabe qué está mirando.
El punto de partida es interesante: un planeta es descubierto y resulta que es igual a la tierra -al menos geográficamente-. Surgen teorías y preguntas, como por ejemplo que esta nueva tierra es en realidad un espejo de la nuestra, o que efectivamente es una tierra de verdad -no un mero reflejo- que tiene otras versiones de nosotros mismos viviendo sus vidas. ¿Tienen la misma vida que nosotros hemos llevado o, quién sabe, la han pasado mejor que uno? ¿Qué pasa si se busca el contacto? Todo esto es lo único interesante de la película porque instala dichas preguntas y también porque la presencia del planeta genera paranoia y extrañeza. ¿Qué secretos y verdades serán revelados? ¿Estamos solos en el universo, estamos solos como individuos? El problema, el grandísimo problema es que esto del planeta aparecido es un disfraz, una máscara, una trampa argumental, una ocurrencia sin cimientos. Ya dijeron Marling y Cahill que primero se les ocurrió eso de hacer una película de "encuentros con uno mismo" -así de vaga la idea- y luego crearon todo el entorno de ciencia ficción existencialista -indie, porque no hay que olvidar que son indies... y es que a mí "indie" me genera una sensación distinta a la de "independiente": el primero se (auto)dota de cierto aura intelectual que en la mayoría de los casos no es, y el segundo simplemente es financiado por productoras pequeñas y medianas-. Y, para que la cosa empeore, por sobre eso de encontrarse consigo mismo los creadores consideraron oportuno inventarse un romance soso y cursi envuelto en culpabilidad y redención. El drama humano, que no puede faltar poque si lo hace entonces nuestros luminarias -Cahill y Marling- se sienten superficiales y tontos.
Lo cierto es que detrás de todo lo anterior no hay reflexión alguna. Ni sobre el planeta dos y su repentina aparición o las implicancias de ser un "doble" ni tampoco sobre esa historia humana tan manoseada y vista en gran cantidad de ocasiones -no exactamente igual, pero sí casi lo mismo-. "Another Earth" es una intrascendencia con todas sus letras; típica ínfula proveniente de esas curiosas y aventureras mentes jóvenes que tienen los indies, quienes además gustan de hacer cine de género fuera del género pues lo importante para ellos es el fondo -fondo que busca subvertir la forma, o eso me imagino-. En este caso, de ciencia ficción poco y nada -que un planeta aparezca y un sujeto millonario haga un cohete para visitarlo no es realmente ciencia ficción, género que de todas formas es mucho más que máquinas ultratecnológicas-, y de fondo aún menos, por lo que eso de subvertir la ciencia ficción queda en nada... y el experimento acaba en estrepitoso fracaso que, miren ustedes, aún así gana premios -de índole independiente. ¿Quién se mira más el ombligo? ¿Los hollywoodenses o los indies?-.
Lo mejor que tenían, esto es la presencia del planeta dos, acaba como un elemento que se rehuye. ¿Y para qué?
Por si fuera poco, la puesta en escena de Cahill es confusa y errática, una clara propuesta que busca materializar la extrañeza de la gente pero que se muestra como un simple juego de cámaras y texturas y esas cosas -eso sí, hay buenas imágenes repartidas por ahí-. La atmósfera está pobremente lograda, y la narración es floja y débil -las secuencias anodinas, aletargadas, sin nada que aportar son bastante comunes-. Eso sí, hay un par de buenos momentos, como cuando la chica cuenta la historia del cosmonauta ruso o aquellos relacionados a la especulación -por decir- científica sobre el planeta dos; pero "Another Earth" como conjunto deja mucho que desear. Lo peor es que su relato no logra en ningún momento tratar eso de encontrarse a uno mismo, y acá llegamos a otro punto: eso de encontrarse a... ¿lo dicen de manera literal o espiritual? Porque así como todo comienza y se anuncia, da la impresión de que lo que se busca es hablar de la primera posibilidad aunque en realidad tenga tratamiento propio de la segunda. Mal enfoque ahí, punto de vista erróneo, mal posicionada la mirada. Y bueno, ya es suficiente...
"Another Earth" es un lánguido y vacuo transitar a través de preguntas que se hacen las interesantes pero carecen de fondo y desafío. Además, la cinta entera carece de emoción y está hecha como si fuese compleja... Al menos se va rápido y de vez en cuando tiene minutos que llaman en algo la atención. Si tuviera que definirla a la rápida, diría que "Another Earth" es un dramón romántico facilón con un planeta ahí flotando porque sí. Una promesa sin cumplir que ni con su ridículo final encuentra consuelo. Igual da rabia cuando alguien se cree mejor que el género en el que supuestamente se enmarca; pero como digo, ya es suficiente...
Para lo buena que la tildaban, esto es decepcionante. Y por méritos propios, mala película. No les recomiendo "Another Earth", y ahora tengo menos ganas de ver "I Origins" -¿qué buscarán en esa cinta? ¿Los orígenes de uno como persona? Más les vale que valga la pena...-. Señor, dame tu fortaleza.
Brit Marling -actriz que ha adquirido cierta fama a raíz de esta película, que promoción no le faltó- es una tipa que, el mismo día en que se descubre un nuevo planeta -que con el tiempo se muestra idéntico a la tierra y cada vez más cercano-, se embriaga y tiene un accidente de tránsito. Cuatro años después, cuando la sociedad se siente nerviosa ante la presencia del planeta "Tierra 2", la chica esta sale a la calle e intenta retomar su vida.
Si no me lo dice wikipedia entonces no me doy cuenta en nada. Al parecer, Mike Cahill y Brit Marling -crearon la historia juntos- querían hacer una película que tratara sobre el encontrarse con uno mismo, o qué pasaría si uno se encuentra con uno mismo. Y como digo, no es esa la impresión final que me queda. Lo que pensé, más bien, fue que... no... no pude sacar nada en limpio, si les soy sincero. Entre tanta pretensión uno se pierde y no sabe qué está mirando.
El punto de partida es interesante: un planeta es descubierto y resulta que es igual a la tierra -al menos geográficamente-. Surgen teorías y preguntas, como por ejemplo que esta nueva tierra es en realidad un espejo de la nuestra, o que efectivamente es una tierra de verdad -no un mero reflejo- que tiene otras versiones de nosotros mismos viviendo sus vidas. ¿Tienen la misma vida que nosotros hemos llevado o, quién sabe, la han pasado mejor que uno? ¿Qué pasa si se busca el contacto? Todo esto es lo único interesante de la película porque instala dichas preguntas y también porque la presencia del planeta genera paranoia y extrañeza. ¿Qué secretos y verdades serán revelados? ¿Estamos solos en el universo, estamos solos como individuos? El problema, el grandísimo problema es que esto del planeta aparecido es un disfraz, una máscara, una trampa argumental, una ocurrencia sin cimientos. Ya dijeron Marling y Cahill que primero se les ocurrió eso de hacer una película de "encuentros con uno mismo" -así de vaga la idea- y luego crearon todo el entorno de ciencia ficción existencialista -indie, porque no hay que olvidar que son indies... y es que a mí "indie" me genera una sensación distinta a la de "independiente": el primero se (auto)dota de cierto aura intelectual que en la mayoría de los casos no es, y el segundo simplemente es financiado por productoras pequeñas y medianas-. Y, para que la cosa empeore, por sobre eso de encontrarse consigo mismo los creadores consideraron oportuno inventarse un romance soso y cursi envuelto en culpabilidad y redención. El drama humano, que no puede faltar poque si lo hace entonces nuestros luminarias -Cahill y Marling- se sienten superficiales y tontos.
Lo cierto es que detrás de todo lo anterior no hay reflexión alguna. Ni sobre el planeta dos y su repentina aparición o las implicancias de ser un "doble" ni tampoco sobre esa historia humana tan manoseada y vista en gran cantidad de ocasiones -no exactamente igual, pero sí casi lo mismo-. "Another Earth" es una intrascendencia con todas sus letras; típica ínfula proveniente de esas curiosas y aventureras mentes jóvenes que tienen los indies, quienes además gustan de hacer cine de género fuera del género pues lo importante para ellos es el fondo -fondo que busca subvertir la forma, o eso me imagino-. En este caso, de ciencia ficción poco y nada -que un planeta aparezca y un sujeto millonario haga un cohete para visitarlo no es realmente ciencia ficción, género que de todas formas es mucho más que máquinas ultratecnológicas-, y de fondo aún menos, por lo que eso de subvertir la ciencia ficción queda en nada... y el experimento acaba en estrepitoso fracaso que, miren ustedes, aún así gana premios -de índole independiente. ¿Quién se mira más el ombligo? ¿Los hollywoodenses o los indies?-.
Lo mejor que tenían, esto es la presencia del planeta dos, acaba como un elemento que se rehuye. ¿Y para qué?
Por si fuera poco, la puesta en escena de Cahill es confusa y errática, una clara propuesta que busca materializar la extrañeza de la gente pero que se muestra como un simple juego de cámaras y texturas y esas cosas -eso sí, hay buenas imágenes repartidas por ahí-. La atmósfera está pobremente lograda, y la narración es floja y débil -las secuencias anodinas, aletargadas, sin nada que aportar son bastante comunes-. Eso sí, hay un par de buenos momentos, como cuando la chica cuenta la historia del cosmonauta ruso o aquellos relacionados a la especulación -por decir- científica sobre el planeta dos; pero "Another Earth" como conjunto deja mucho que desear. Lo peor es que su relato no logra en ningún momento tratar eso de encontrarse a uno mismo, y acá llegamos a otro punto: eso de encontrarse a... ¿lo dicen de manera literal o espiritual? Porque así como todo comienza y se anuncia, da la impresión de que lo que se busca es hablar de la primera posibilidad aunque en realidad tenga tratamiento propio de la segunda. Mal enfoque ahí, punto de vista erróneo, mal posicionada la mirada. Y bueno, ya es suficiente...
"Another Earth" es un lánguido y vacuo transitar a través de preguntas que se hacen las interesantes pero carecen de fondo y desafío. Además, la cinta entera carece de emoción y está hecha como si fuese compleja... Al menos se va rápido y de vez en cuando tiene minutos que llaman en algo la atención. Si tuviera que definirla a la rápida, diría que "Another Earth" es un dramón romántico facilón con un planeta ahí flotando porque sí. Una promesa sin cumplir que ni con su ridículo final encuentra consuelo. Igual da rabia cuando alguien se cree mejor que el género en el que supuestamente se enmarca; pero como digo, ya es suficiente...
Para lo buena que la tildaban, esto es decepcionante. Y por méritos propios, mala película. No les recomiendo "Another Earth", y ahora tengo menos ganas de ver "I Origins" -¿qué buscarán en esa cinta? ¿Los orígenes de uno como persona? Más les vale que valga la pena...-. Señor, dame tu fortaleza.
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