Somewhere - 2010

Directora: Sofia Coppola

La banda sonora de "The Virgin Suicides" ha estado sonando en mi cabeza todo el día, pero no me quejo, al contrario, además ha estado lloviendo (por fin) y la combinación es perfecta. En cualquier caso, después de aquella mágica opera prima, Sofia Coppola hizo "Lost in Translation", película que vi mucho, mucho antes de comenzar este blog y cuyo lejano recuerdo me deja sensatas y gratas sensaciones, una película que se podía ver pero que tampoco era para perder la cabeza, digo yo, además Bill Murray no me hizo ni puta gracia en aquella ocasión. Como sea, nos la saltamos y también nos saltamos esa película de María Antonieta, y por lo tanto, llegamos a "Somewhere".

Creo haber leído algo de que Sofia Coppola hizo "Somewhere" como manera de exorcizar la forma en que ella se sentía cuando niña, siendo hija de Francis Ford Coppola, siendo hija de un grandísimo director de cine que, a todas luces, se la pasaba ocupado, seguramente dedicando gran atención e incluso afecto a sus labores cinematográficas, aunque, por otro lado, Sofia debió pasarlo bien en aquellos rodajes, molestando a Rusty James y eso. En cualquier caso tal antecedente no es realmente esencial, sólo lo traje a colación porque me pareció, no lo sé, pertinente.
"Somewhere" se trata de Johnny, de apariencia desaliñada y desgarbada (apariencia que debería cultivarse más, digo yo, aunque sería terrible que llegara a convertirse en moda o tendencia, no por lo extraño que sería ver a tanta gente sucia sino que porque dicha apariencia perdería su carácter auténtico: de lucir así por desinterés y dejadez), un actor que al parecer está a la altura de Al Pacino, Robert De Niro, Meryl Streep y Dustin Hoffman, entre otros, que se la pasa muy ocupado yendo a sesiones de fotos, conferencias de prensa, premiaciones y entrevistas, además de ir de fiesta en fiesta, mujer en mujer y tiempo muerto en tiempo muerto. A veces tiene que pasar el día con la hija, pero luego vuelve a su banal e insustancial rutina. La gracia es que para este actor tener una hija y pasar tiempo de calidad con ella, en un inicio, es lo mismo que ver a unas strippers bailar en su habitación o quedarse sentado fumando y bebiendo cerveza mirando la pared: la hija es un momento más entre otros, nada realmente especial: cumplir, etc., hasta la próxima. No obstante algo pasa y él debe hacerse cargo de la hija, y el tiempo con ella pasa de ser bonito pero banal a especial y lo único que le da sentido a su vida, insoportable una vez deba volver a su vieja y despreocupada rutina solitaria, de la cual querrá huir y alejarse (porque Johnny, la gente está muy loca). El amor supera al éxito y la fama. No teman, no estamos ante un drama meloso que recurre a la lágrima fácil ni nada por el estilo, pero tampoco hace gala de la sencilla e hipnótica estilización vista en "The Virgin Suicides". "Somewhere" está dirigida de manera austera y sin grandes alardes de estilo, fiel a esta premisa de lejanía emocional y afectiva, con una narración pausada que no teme en aletargarse de vez en cuando (como en las escenas de las strippers o mientras el protagonista se queda sentado haciendo nada), riesgo que Sofia Coppola logra sortear con comodidad aunque el resultado final no sea nada maravilloso ni magnífico, a lo más solvente y efectivo, pues sus intenciones están bien planteadas y desarrolladas, y la relación padre-hija resulta verosímil, convincente y, por momentos, hasta tierna. Un retrato de la cotidianidad de este padre y su hija, relación tratada de manera sutil y humana, sin grandes tragedias o bruscos giros de guión, construido con paciencia, tino y suavidad.
Ganó en Venecia ese año, lo cual parece mucho pero una vista rápida a la competencia sugiere que esa edición no fue especialmente memorable. Como sea, buena película, amena película, y simpática Elle Fanning.